Retrospectiva de Introversion Software (2/2)

En esta segunda entrega de nuestra retrospectiva sobre Introversion Software, nos centramos en su último lanzamiento: Prison Architect. Si os perdisteis la anterior entrega, podéis echarle un vistazo aquí.


En este simulador debemos diseñar y gestionar una prisión. Nuestras tareas consistirán en definir edificios y estancias, gestionar operarios, fuerzas de seguridad, etc. Todo ello para cubrir las necesidades de los convictos, y evitar en la medida de los posible los motines. El juego nos presenta una vista superior, algo simple, pero funcional. El estilo de los gráficos es original, los personajes (representados solo con cabeza y torso) tienen cierto aire de cómic. Aunque la temática se mantiene lo más generalista posible, tiene muchas influencias del modelo de prisión norteamericano (véanse esos monos naranja tan característicos).


Prison Architect nos recuerda a clásicos basados en temática de gestión, como Theme Hospital o Dungeon Keeper. Llama la atención que no controlamos directamente a los personajes, sino que marcamos órdenes en el mapa y los operarios que estén libres y tengan acceso las realizarán. Este concepto, que fue introducido por títulos como Dungeon Keeper, tiene su máximo exponente en Dwarf Fortress, otra de sus influencias más directas.

Los chicos de Introversion nos presentan Prison Architect mediante este vídeo que no tiene desperdicio (bugs y voces -cutres- de trailer incluidos):


El desarrollo (actualmente en estado alfa) y la distribución, tienen cierta originalidad. Se deja notar la influencia de los nuevos modelos de negocio que se están implantando en el sector. Podemos adquirir el juego de forma anticipada, y para ponerlo más interesante, los desarrolladores se han comprometido a publicar una versión cada mes con nuevas funcionalidades. Además, nos presentan cada versión en su canal de Youtube, a modo de videoblog. Esto hace que nos mantenga pendientes de las novedades, y retomar el juego una y otra vez para probarlas.

Podéis ver en este ejemplo lo bien que se lo pasan los integrantes de Introversion: Chris y Mark grabando uno de sus vídeos:


Otro punto original son las opciones de compra, empezando por el paquete más básico (unos 22 €, que nos da derecho a participar en el programa de alfa y recibir el juego definitivo una vez acabado). En cada opción tenemos más y más contenidos adicionales (banda sonora, el resto de juegos de Introversion, etc.). Hasta llegar a los niveles más caros, los cuales tenían un número limitado de compradores (actualmente están todos agotados). En estas opciones se nos ofrecía la posibilidad de aparecer en el juego como presos (con biografía y caricatura); o incluso ser uno de los cinco directores de prisión disponibles para seleccionar; por el "módico" precio de $1000 (poco más de 700€).

Chris y Mark caracterizados como presos. Los compradores que eligieron la opción también han sido caricaturizados y llevados prisión :)
Dentro del propio juego podemos seleccionar las hojas de antecedentes penales creadas por la comunidad, y pedir la transferencia de los presos a nuestra prisión.

Aunque el modo campaña no está todavía disponible, sí podemos jugar un pequeño tutorial, el cual nos deja claro que gestionar una prisión es un tema muy serio. Podéis ver un gameplay del mismo aquí.

El tutorial con el que se nos introduce en Prison Architect es algo tétrico, si el resto de la campaña mantiene el nivel va a ser uno de los puntos fuertes. 
De momento podemos disfrutar del modo libre o sandbox, donde no tenemos objetivos principales (aun así, podemos seleccionar "subvenciones", mini-misiones que debemos cumplir a cambio de una recompensa económica). Nuestra prisión es todo un ecosistema en el que nuestra principal prioridad será facilitar los servicios más básicos: comida, duchas, lavandería, celdas para los presos, etc.

La cantina, duchas o la lavandería son algunas de las instalaciones que deberemos mantener en nuestra prisión.
Pero establecer las bases es solo el principio. Prison Architect nos plantea, como nos tienen acostumbrados sus creadores, una serie de cuestiones morales que como poco, deberían despertar la atención del jugador. Y es que gestionar una prisión es ya de por sí un tema peliagudo. Podemos establecer distintos métodos de castigo, usar celdas de aislamiento, utilizar perros y guardias armados para intimidar a los reos. Una serie de medidas que pueden evitar motines dentro de la prisión, pero que harán que nuestros presos sean menos proactivos, y no participen en los programas de rehabilitación que podemos implantar. Deberemos encontrar el equilibrio entre mano dura y recompensa para evitar que nuestra cárcel fracase.

Ayudar a la rehabilitación de los presos es uno de los puntos fundamentales, podemos establecer programas de formación básica, ayuda psicológica o talleres de manualidades (siguiendo con los topicazos, podemos poner a los reos a imprimir matrículas de tráfico)
No solo debemos mantener la solvencia económica del sistema penitenciario; sino que nuestra prisión será sometida a evaluación (una de las últimas características introducidas). Cada preso, según el trato recibido y la experiencia vivida durante la condena, tiene un índice de rehabilitación; es decir, las posibilidades de reincidir o no en un delito. La evaluación global de todos los presos es la puntuación que recibe nuestra prisión y nos indica lo bien o mal que lo estamos haciendo.

Si no sabemos llevar nuestra prisión podríamos perder la partida, en cuyo caso podemos seguir jugando... como presos dentro del propio complejo carcelario que hemos creado.




Resumiendo, Prison Architect es un juego muy adictivo y eso que todavía no está acabado. Estaremos pendientes de las sorpresas que nos guardan los chicos de Introversion, ¡seguro que vendrán!

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